Apuntes de Diego “El Sereno”
Novena parte
Apuntes de Diego “El Sereno”
Novena parte
Desde la Ruta Romana de Híspalis a Emérita hasta el Camino de Santiago de la Frontera
La ruta décima del recorrido ibérico de la
Vía Romana del itinerario de Antonino Augusto Caracalla transitaba por la parte
de la península ibérica entre Híspalis (Sevilla) y Emérita (Mérida), que
recorría una distancia de 162 ó 155 millas romanas (según autores)
En
aquella época Guadalcanal estaba enclavada en el amplio territorio
de la península ibérica conocida como Beturía. Esta
zona comprendida entre los cursos medios e inferiores de los ríos
Guadiana (en latín Ana) y Guadalquivir (en latín Baetis),
siendo anexionado por los romanos en los albores del siglo 27 antes de C. e
incluido en la provincia de Hispania Ulterior.
Ya en aquella época y según el historiador Rodrigo Caro y citando a Plinio, nombra a Guadalcanal como Tereses, zona de gran importancia minero metalúrgica, enclavada en el cerro de Monforte (Mons Fortis), estando en el intermedio de la ruta entre Celti y Regina, en su trazado común de la ruta hasta Constantina.
Ruta de Al Ándalus a los Reinos Cristianos. –
La mayor época de esplendor de Guadalcanal fue sin
duda en las diferentes etapas de la Edad media y principios de la Edad Moderna.
Su situación natural como parte y frontera de la provincia de León de la Baja Extremadura
y el Priorato de San Marcos, llegando a ser Encomienda de la Orden de Santiago,
hizo descanso y morada de reyes, y grandes señores.
Era camino natural del que partía de Sevilla y se extendía
hasta Toledo, Madrid, Burgos y la ruta alternativa hasta Medina del Campo.
De hecho, Los Reyes Católicos atravesaron esta ruta y
pasaron por Guadalcanal cuatro veces. Así, el primer viaje lo hicieron por
separado en 1477, ya que la reina Isabel se encontraba en Toledo y partió hacía
Sevilla, se calcula que pasó el dia 15 de Julio por nuestra villa, continuando
a Sevilla, pasando entre otras por las localidades de Cazalla, Lora del Río y
Cantillana. El rey Fernando partió de Medina del Campo hacia la ciudad
Hispalense ese mismo año, pasó por Guadalcanal el día 2 de septiembre del
citado año 1477. El tercer viaje lo hicieron junto los Reyes Católicos en 1502,
se encontraban los monarcas en Sevilla e hicieron el viaje hacía Toledo, parten
de Sevilla el 22 de febrero, a través de Constantina, El Pedroso y Cazalla, llegando
a Guadalcanal el martes 11 de marzo. El último viaje del que se tiene fe de su
paso por Guadalcanal, está datado en 1511, este viaje lo hizo Fernando de ida y
vuelta, ya que partió de Madrid el día 7 de enero, pasó por Guadalcanal el día
27 del mismo mes, pernoctando en la villa los días 27 y 28 y llegando a la
ciudad de Sevilla el 1 de febrero. Allí permanece hasta el 21 de junio, esta
vez partió en dirección a Burgos. De este viaje hay un documento firmado por el
rey Fernando en Guadalcanal el 27 de junio, este documento llamado Sobrecarta
de Naturaleza (título que se utilizaba para reconocer la nacionalidad de un
extranjero como castellano), dirigida al genovés Francisco de Riberol, amigo
íntimo y colaborador de Cristóbal Colón (almirante de las indias).
Este camino ha sido actualizado y dividido en rutas, así, la etapa 6 recorre los términos de Alanis hasta Guadalcanal (pasando por la ermita de Guaditoca), aprovechan antiguas vías romanas y cañadas pecuarias, esta ruta que consta de 28,5 Km. y se puede recorrer a pie o a caballo, mezclando trayecto urbano, asfalto y carril de tierra compactada. En parte seguiremos la antigua cañada de las Merinas, que discurre tanto por áridos paisajes esteparios como por frondosos parajes serranos. Partimos del casco urbano de Alanís seguimos por la A-477, dirección este, tomamos el camino de la Cuesta Blanca, seguiremos hasta el camino Viejo del Oreganal, que llega desde Fuenteovejuna. Seguimos en dirección norte hasta encontrarnos con la carretera SE-165 en dirección oeste, volvemos a retomar la senda que sigue en dirección Guadalcanal. Una vez visitada la localidad, continuamos el Camino Colombino de la provincia de Sevilla tomamos el antiguo camino de la ermita de la Virgen de Guaditoca, patrona de Guadalcanal, donde concluye en el hermoso paisaje de la Vega del Encinar.
Ruta del Azogue. –
La ruta del azogue
o Caminos del Azogue partían de Almadén de la Plata y terminaban en las
Atarazanas del Puerto de Sevilla. Tenía un camino común que partiendo de la
citada localidad Castellana de Almaden pasaba por Hinojosa del Duque hasta
Azuaga, de esta localidad vecina se dividía en dos rutas principales y otras de
confluencia, la ruta llamada de Camino Carretero Occidental llegaba a
Guadalcanal, desde nuestra villa y pasando por Lora del Rio y Cantillana,
bordeaba el Guadalquivir por la margen occidental y llagaba hasta las
Atarazanas del puerto de Sevilla donde se cargaba en grandes cantidades de este
mineral con destino a América, a las minas de plata, principalmente a la de
Potosí, pues se utilizaba para tratar la plata.
El
azogue era un material líquido que una vez tratado se convertía en mercurio.
Durante la época floreciente de la explotación y extracción de plata de las
minas de Guadalcanal en el siglo XVI, explotadas por la Hacienda Real, siendo
su principal administrador Agustín de Zarate, tuvo su mayor auge el llamado
camino occidental.
Ruta del aceite o
camino de los mercaderes. –
Bajo la dominación
de ruta del aceite o camino de los mercaderes, trascurría por las provincias de
Ciudad Real, Jaén, Córdoba, Badajoz y Sevilla, utilizaba la ruta del azogue
desde Azuaga a Sevilla y desde esta seguía por vía fluvial su camino hasta
Sanlúcar de Barrameda, para iniciar la travesía atlántica de las mercancías
hacía las americanas. Esta ruta igualmente era utilizada en sentido contrario
por mercaderes y arrieros para distribuir la mercadería procedente de las
colonias de las Indias conquistadas y colonizadas por los españoles. En
Monesterío se unía otro ramal llamado el Lusitano que procedente de Lisboa recorría
la parte central de Portugal.
Este
camino ya lo citan en un informe de los Visitadores de la Orden de Santiago a
Guadalcanal en el año de 1494, en ella se dice:
“en esta ermita llamada de San Benito
Abad, enclavada en los extramuros de la villa existe una cofradía de ambos
sexos con el título de Ntra. Sra. de la Consolación y San Benito, que son
benefactores de los arrieros que utilizan la ruta del aceite y tienen en ella
es utilizada como morada de descanso”.
Igualmente, en
otro informe de dichos visitadores hablan de la explanada del Humilladero del
Cristo, donde moraban los mercaderes y arrieros en sus idas y venidas, daban
gracias y pedían bienestar y buen camino para finalizar sus quehaceres. Desde
esta explanada en la que posteriormente se construyó una ermita, el camino
seguía o procedía según sentido de la ruta de Azuaga y transcurría por el
antiguo camino de Guaditoca, en ella había una cruz (que aún existe) llamada
del Aceite. Nombrada así porque los arrieros que utilizaban esta ruta para
transportar su mercancía, echaban una cantidad de aceite en la hornacina que
existía en la misma. Este aceite era recogido posteriormente por el ermitaño
del santuario para mantener encendidas permanentemente las lámparas que
iluminaban la imagen de la Virgen.
Fuentes. - De Carcalla a Odón Vías Romanas (Saavedra y Blázquez), Viaje
de los Reyes Católicos a través de la ruta de Guadalcanal (Rafael A. Rivero), Guía
del Camino de Guadalupe por la Provincia de Sevilla (DPS), Rutas Geoparques de
la Sierra Norte de Sevilla (Junta de Andalucía), Ermitas, Caminos y Rutas de la
Sierra Norte (DPS), https://caminodelafrontera.es/ y archivos de autor.
Apuntes de Diego “El Sereno”
Octava parte
En el año 1981 un guadalcanalense, un visionario, un artista, alguien con la sensibilidad y conocimientos suficientes para darse cuenta que el cielo de Guadalcanal era un lugar inmejorable para su observación nocturna decidió empezar una obra titánica; una obra que solo se podía llevar a cabo con la ayuda de las instituciones y estamentos públicos, que debía contar con la necesaria complicidad de sus convecinos y de los pueblos aledaños, y cuyos resultados redundasen en la preparación de futuros científicos estelares, sirviese para el ocio, aprendizaje y diversión de los escolares, y fuera fuente de progreso económico y turístico para toda la zona.
El tiempo le fue condenando al
ostracismo, y lo que fue la idea de un genio andaluz se quedó en boca de todos
nosotros, vecinos que conformamos una hermandad simbólica en torno a nuestro
pueblo en el que rige un rancio sistema de control social donde la envidia y la
crítica al diferente conforma los procesos de inclusión/ exclusión de dicha
comunidad; como la extravagante idea de un loco, de un diferente, de un
extraño.
Yo tuve el placer de conocer a Manolo Chaves en los años 80 a través de mi querido Rafael Rodríguez (“Electrovira”) otro guadalcanalense de pro al que la historia deberá poner en el sitio que le han negado sus deudores. En aquellos entonces Rafalito me dijo que tenía que hablar con uno de esos personajes con los que a mí me gustaba departir, esos que tienen que decir algo, aunque hablen poco, que saben callar y escuchar, que saben mirar de frente y que no se amilanan, aunque vengan mal dadas. Mi sorpresa fue descubrir un genio en medio de la sierra, un excepcional pintor y en aquellos momentos, alguien muy motivado por la idea de hacer de Guadalcanal un referente en la observación astronómica. No me extraña que fuera tertuliano adicto y amigo de Rafael; y por supuesto el que pintara la portada de su obra póstuma: “Guadalcanal, un pueblo en la memoria”.
La semana pasada me lo encontré, como no
puede ser de otro modo, en la tienda de Rafalito “electrovira” y él, muy
eufórico, me enseñó la foto de cómo estaba quedando la entrada al recinto del
observatorio, al que se accede a través de un arco de ladrillos muy del gusto
de la arquitectura historicista sevillana de principios del siglo XX que tan de
moda puso Aníbal González. Fue entonces cuando le pregunté: Manolo ¿qué ayudas
has recibido para hacer el observatorio astronómico?; a lo que me contesto con
palabras cansadas que salen de la impotencia y de la frustración de quien ya no
confía en nada ni en nadie: “A mí nadie me ha dado un duro, económicamente
no me ha ayudado nadie, solamente en la época de Amador ( alcalde de
Guadalcanal) me enviaron albañiles para que me echaran una mano en la
construcción; por lo demás y hasta el día de hoy todo lo he hecho con mis
manos, nadie me ha dado un duro”
Precisamente esa respuesta me hizo
plantearme escribir este artículo dado que estoy al día con las nuevas
oportunidades de negocio que se plantean para la sierra Norte Sevillana a
partir de este año debido a la calificación que ha obtenido Sierra Morena al
ser declarada “Reserva y Destino Turístico Starlight, una certificación que
acredita y avala la calidad de sus cielos nocturnos para la práctica de la
astronomía y la observación del firmamento. Este galardón es otorgado por la
Fundación Starlight y está avalado tanto por la UNESCO como por la Organización
Mundial del Turismo”; y que debemos agradecer al trabajo y esfuerzo de la
Asociación para el desarrollo integral Territorial de sierra Morena (ADIT) “y
ejecutado por el consorcio Dark Sky Advisors formado por la unión de la
Asociación Astronómica Hubble y la empresa Iberus Medio Ambiente”.
Esta
misma asociación ha creado una página web dedicada a la astronomía en Sierra
Morena que podéis consultar en la siguiente dirección: http://www.astronomiasierramorena.com
o http://astronomia.sierramorena.com.
Igualmente
podéis indagar sobre Starlight en la página del Instituto de Astrofísica de
Canarias http://www.iac.es/,
donde hallareis un artículo muy interesante sobre el nuevo producto turístico
de Sierra Morena ligado a la observación de estrellas: http://fundacionstarlight.org/sierra-morena-y-sierra-sur.../
, en el que se pueden leer párrafos como: “A este respecto, destacó que el
turismo astronómico será uno de los nuevos productos que quedarán recogidos en
la futura la Estrategia Integral de Fomento del Turismo de Interior Sostenible
de Andalucía 2014-2020, que movilizará alrededor de 230 millones de fondos
públicos”.
Últimamente se ha puesto de moda todo lo relacionado con la observación de
estrellas en Sierra Morena como podéis comprobar en las numerosas noticias
aparecidas en prensa de la que os pongo un ejemplo: http://www.europapress.es/.../noticia-casi-decena-pueblos..., y que nosotros achacamos a la afluencia de dinero que en un futuro no muy
lejano hará su aparición en la zona y de los que ya se está viendo algunos
resultados. Extraemos unos párrafos del artículo anterior:
“Casi una decena de municipios de la
provincia sevillana realizarán obras encaminadas a la ordenación y promoción
turística gracias a los más de 300.000 euros que recibirán del Plan
Complementario del Plan Provincial Bienal 2014/2015 para inversiones
financieramente sostenibles, también denominado Plan Supera, desarrollado con
fondos del superávit de la Diputación de Sevilla de 2012.
Según la información a la que ha tenido acceso Europa Press, en concreto,
son un total de nueve los pueblos que se beneficiarán de estos fondos, siendo
Guadalcanal el que mayor número de actuaciones acumula, con un total de cinco
proyectos previstos, para lo que cuentan con una inversión de 29.431 euros.
En este municipio, las obras del Plan
Supera irán destinadas al acondicionamiento de parte del recinto ferial para
uso alternativo como explanada para el estacionamiento de autocaravanas, el
acabado de la oficina de información del Parque Natural Sierra Norte, la
adecuación de una zona para visualización astronómica y ubicación de una
estación de observación 'Starlight' en el enclave de la Piedra de Santiago, así
como para la realización de un video documental HD sobre la Semana Santa de
Guadalcanal y la reurbanización y remodelación de la calle Santa María.”
Y yo me pregunto: ¿Ahora que hay dinero
para desarrollar la observación de las estrellas en Guadalcanal tampoco hay
dinero para Manolo Fernández? Chaves y su observatorio? ¿Qué pasa en este
pueblo que el único que ha creído de verdad en las posibilidades de la sierra
como visor estelar lo ningunean y lo excluyen de lo que puede ser un verdadero
motor económico del turismo en esta localidad?; ¿Cuáles son las razones ( yo me
las imagino) para que se tenga que realizar una nueva ubicación para ver
estrellas existiendo un observatorio astronómico?; ¿Por qué Guadalcanal nunca
se da a valer y defiende con uñas y dientes su preeminencia en estos temas dado
que posee un telescopio e instalaciones adecuadas para la observación del
firmamento desde hace 30 años?; ¿Por qué no se ha contado con Manolo para
absolutamente nada cuando él fue el pionero en estos temas en la Sierra Norte
de Sevilla con la creación e instalación de un observatorio astronómico?;
¿Quién sabia de estrellas en Guadalcanal y pueblos aledaños en los años 80 y 90
del siglo pasado?
Entonces, después de estas reflexiones,
tengo que pensar que quizás el interés no está en el conocimiento de las estrellas,
en la investigación y observación de las constelaciones; en tener un lugar para
educar y divulgar el conocimiento a nuestros escolares; quizás tan solo sea
otra moda que exprimir para sacar el dinero los más rápidamente posible sin
interés de construir futuro.
De todas formas, para quien le interese,
a continuación, doy aquí unos pocos datos del Observatorio “ALKAID” de
Guadalcanal, denominado así porque el mismo día que se le ocurrió a Manolo
la idea de construir un telescopio para ver las estrellas se hallaba con sus
hijos jugando en la Ribera y en el cénit del firmamento se encontraba dicha
estrella denominada también Benetnasch, siendo la tercera estrella más
brillante de la constelación de la Osa Mayor:
Alberto Bernabé Salgueiro.
Apuntes de Diego “El Sereno”
Tras
dos años de grandes esfuerzos, nos parece ya una realidad este observatorio que
se está construyendo en la Sierra Norte y del que mostramos dos fotografías de cómo
se encuentran las obras en este momento.
En el Monte del Viento tenemos a Manuel Fernández Chaves,
quien está llevando a cabo esta singular obra, a quien preguntamos.
__
¿Con que objetivo te pusiste a hacer
todo esto, que a nosotros no nos parecía en un principio que iba a ser de tanta
envergadura, y sin embargo a medida que va avanzando el tiempo, nos va
pareciendo más importante?
_
Creo que siempre que se comenta con alguien algo que uno vio y le impresionó
mucho, nadie puede hacerse una idea tan clara como el que lo tuvo ante sus
ojos. Y el objeto principal de esta obra es la de aportar más cultura para mi
pueblo en la medida de mis posibilidades.
__ Dices que, para tu pueblo, esto hay
que explicarlo más extensamente.
_
Digo para mi pueblo, y digo bien. Este observatorio es para Guadalcanal “ya lo
dije en una charla en la biblioteca”, así como para toda la comarca a la que
podrán venir estudiosos de la Astronomía, Colegios, Instituto e incluso de la
Universidad de Sevilla.
__
¿Qué organismos le han ayudado
entonces?
_
Económicamente, hasta ahora ninguno. Aunque en la Junta de Andalucía me han
dado muy buenas impresiones sobre una ayuda que pedí y La que posteriormente me
den por medio de las Consejerías de Medio Ambiente, educación y Cultura. He
tenido ayudas muy valiosas en lo que se refiere a materiales, mano de obra por
el Ayuntamiento y varios particulares.
La redacción
Revista de Feria 1985